8.4.12

Historias de una mesa (II)

- ¿Por qué me das las llaves si te he pedido un pañuelo?
- ¿No has pensado nunca en las vidas de las cosas olvidadas?
- ¿Cómo?
- Vi un pañuelo asomado al charco, donde se pierden las certezas, y cuando estaba a punto de saltar desde la acera una brisa se lo llevó por el aire y como dos aristogatos sobrevolaron los tejados de París trazando una misteriosa coordinación con la música de Debussy que se escapó del concierto uniéndose a ellos.
- Y ¿donde están ahora?
- Allí, en todo lo alto de los sueños.
- ¿Subimos a soñar?
- Vamos.
- ¿Sabes?
- ¿Qué?
- Nos olvidamos de pagar.

11 commenti:

Gliphe ha detto...

Ohhh, llevo un tiempo leyéndote y lo cierto es que es un placer hacerlo. Creo que me apunto a irme también a soñar.
Felicidades por el blog.

Noelplebeyo ha detto...

con ese planteamiento...nadie puede resistirse subir...hasta la picota de la torre

isinspira ha detto...

:) gracias
París y Debussy :)

MA ha detto...

Los sueños suenos son ...la vida es sueño ...entonces soñemos y hagamos los sueños realidad.

Besos de MA.

El blog de MA.

Sara ha detto...

¡¡Qué bueno!! y encima el café gratis jajajajaja
¡lo conseguiste!!

María Sur ha detto...

Al final encontraste tu historia particular para la frase...
Sería estupendo ser capaz de seguir el camino de esas cosas olvidadas que invitan a soñar... Tu taza sigue llenándose de días fríos cuando vuelvo a ella... Espero que los sueños nunca bajen del tejado.

Tropiezos y trapecios ha detto...

Cuando algo no tiene precio nos olidamos de pagar ;) Me ha encantado la entrada, es peciosa, sutil, dulce y profunda. Me recordó a aquel diálogo :
-"¿Y dónde está ahora?"
- "Seguirá bailando en la azotea. Yo nunca estuve a su atura" :)
Un abrazo enorme!!!
Favole

Paula ha detto...

Seguimos soñando :)

Esther ha detto...

Esos olvidos... ¿serán por el amor?

Me gusta subir a soñar, aunque sea un ratito. Me apunto, a ver si recupero ese placer así, de paso ¿Qué sería de la vida sin poder soñar? :)

Camaleona ha detto...

Los sueños tienen que estar ahí, bien altos, en los tejados de París... yo también quiero soñar :)

Rebeca Gonzalo ha detto...

Hay momentos mágicos y tú tienes la facultad de hacer magia con las palabras. ¡Eres muy grande!

Besotes.