6.8.07

A partir de una frase...puede hallarse toda una vida

.- Le escuché en silencio porque escupir aquella historia parecía costarle demasiado.
El volumen de la Tv estaba tan alto que no le permitió oír el ruido que hizo la puerta al abrirse. Amparados en la penumbra de la noche un numeroso grupo de inmigrantes penetró en la iglesia huyendo del fin que les aguardaba. El silencio que habían intentado mantener mientras entraban en el interior se rompió cuando uno de ellos movió sin querer uno de los modernos bancos que ocupaban la nave central. El sonido no pasó desapercibido para el párroco el cual acudió rápido al lugar encendiendo las luces y descubriendo una escena que no olvidará.
Allí temerosos apiñados en una esquina se hallaban unas cuarenta personas vistiendo harapos, descalzas y empapadas.

Una mirada, la mirada de una niña cuyos inmensos ojos suplicaban una mirada de esperanza, llamó su atención.
Su primera reacción fue, ninguna. Supo en ese instante lo lejos que estaba de la realidad. Aquella iglesia recién blanqueada, el material impecable reluciendo en medio de una nave tan, tan distante de aquella gente que parecía grotesca la escena. Aunque al fin y al cabo era para ellos toda aquella parafernalia.
La noche fue larga, unas llamadas a un lado y a otro del laberinto administrativo y definitivamente supo la cara oculta de la realidad. Tenía que entregar a los refugiados para su deportación. No podían permanecer allí.
.- ¿Para qué sirve entonces una iglesia? – Se dijo en voz alta
Sin papeles fuera! Esa era la respuesta que recibía tras cada llamada.
Pasaron los días, y sabía que la decisión de negarse a cumplir el desalojo le supondría un sinfín de problemas, mas siempre pensaba que sus problemas no eran tales al lado de quienes el mayor problema era sobrevivir. Llegaron no sin nada, sino con una ilusión, y no iba a permitir que se marcharan sin ella.
Finalmente aquella resistencia tuvo su recompensa. Sin quererlo la prensa y la opinión pública que reaccionó en un ejercicio sincero de solidaridad pero también de reconciliación con su conciencia consiguieron que la travesía que comenzó a muchísimos kms de allí llegara a buen puerto y los papeles, los dichosos papeles les fueron concedidos.
Han pasado unos años desde entonces, la iglesia ya sin el brillo de antaño se erguía entre bloques de sueños dejando la cal entrever el paso del tiempo. El párroco había fallecido y el lugar carecía de interés para el vecindario, apenas unas señoras comentaban en un banco los devaneos del barrio entre medias de algún que otro rezo
Aquella tarde algo interrumpiría aquel debate. Giraron sus cabezas al oír chirriar la puerta y se presinaron al ver entrar por ella una familia. Una familia de raza negra, ella, él y un pequeñín que confundió el pasillo central con una inmensa pista de patinaje deslizándose por ella hasta el escalón mismo del altar. El tímido sssshhh de los padres no pudo evitar tal destreza en el deslizamiento ante la asombrada mirada y posterior murmurada de las pulcras damas.
Cuando estuvieron frente al nuevo párroco conocieron del fallecimiento del anterior y la madre le dijo que venía a agradecerle aquella mirada de esperanza. El murmullo del grupo que les observaba desvió al unísono su atención

.- Dígales a aquellas señoras para que sirve una iglesia – Le decía la madre en ese momento al oído – Escúpalo! ¿Sabe Vd una cosa? – Le siguió diciendo – Escupir fue la primera palabra que escuché la primera vez que pisé esta iglesia – Concluyó con una sonrisa mientras cogía a su hijo en brazos.
En ese instante el párroco pudo observar en el pequeño unos inmensos ojos llenos de vida.

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18 commenti:

Anonimo ha detto...

Hola Carlos!! No sé si has vivido in situ, alguna situación como la que describes, porque yo si lo he hecho y puedo decirte, que si hubieras estado allí, no podrías haberlo contado mejor.
Es todo un honor para mí leer tus relatos denunciantes y llamadores de conciencias adormiladas.
Besos.

Laura Luna ha detto...

Muy buena denuncia, Carlos :) Has sabido contar esta historia como si tú mismo la hubieras vivido :) Como sugerencia, te diría que si lo hubieras escrito en primera persona, aún te habría quedado mejor, pero tal y como lo has hecho, me ha encantado :D
Un besito,
Mun

Unknown ha detto...

Un historia muy real y, en mi opinión, muy bien contada. Te felicito. un abrazo

Carabiru ha detto...

Me ha encantado ese toque de denuncia.
Y sobre todo el detalle del niño resbalando por el pasillo, yo siempre he querido hacerlo, pero mi madre nunca me ha dejado.

Y también el detalle de reñirles a las beatas... mucho rezar y poca ser cristianas...

Miss Lawliet ha detto...

Es bueno ver que hay quien se queja y denuncia y sueña con un mundo en el que haya menos injusticias y más amor hacia la vida de los demás.

Un buen cuento, lleno de realidad, de cruda realidad.

Besos.

Mj ha detto...

:) Cada vez que escribes una historia, haces del mundo un lugar mejor...

atenea ha detto...

Me gustan estas historias que nos hacen pensar... si no hubiera tantas personas como esas que murmuraban en la iglesia de tu relato... qué poquita memoria tiene la gente en este país, de verdad.

Muaksss!!!

Klover ha detto...

Hola defensor de las causas no pérdidas!

Es genial que hagas cuentos de este tipo, con ternura y matando dos pájaros de un tiro...

Cuidate!

Anonimo ha detto...

Hola Carlos..Ya me he puesto al día con tu blog..ya sabes que ando por la tierrina, como tú..Pero ya he leído todo. Preciosas historias cómo siempre me quedo encandilada leyendolas, esta..es muy utópica pero linda, quierod ecir que tu y yo sabemos que las cosas no son así..Un párroco actual hubiera llamado a la policía igual..vaya...Los tiempos hanc ambiado mucho por desgracia.
En cuanto a los niños desaparecidos.., qué más podemos decir ni contar.., Hablar de ello, es darles a esos h de su madre demasiada relevancia..creo que es tiempo de endurecer las penas de carcel y educar y cuidar a nuestros hijos, para que nunca hagan lo que hacen estas personas con las vidas ajenas
Disfruta de tus vacaciones...
Besos

Anonimo ha detto...

Hola! que relato, sólo puedo decir que me ha gustado y que lamentablemente pasa.

Cuidate...saludos!

Anonimo ha detto...

Doble moralidad o moralina...Muy buen relato.¡ Me encanta como lo has desarrollado¡. Besitos.

Luz de Luna

Anonimo ha detto...

Luego paso a leerte. Ahora, lo importante: Uds metieron 5, no sotros 2. Pero les clavaron 3 y , nosotros, terminamos con la valla sin vencer. Asi que no hagas mucho alarde, el campeonato recien comienza.

Chau, y vamo'la cademia

Sara ha detto...

Lo prometido es deuda ;)
Me ha parecido un relato precioso, no podría sentirme más orgullosa que ahora, porque has utilizado mi frase para denunciar algo tan injusto...
Y encima de la forma en la que lo has hecho que creo que no había otra mejor de describir lo que nos cuentas...
Me quedo con la frase "Llegaron no sin nada, sino con una ilusión, y no iba a permitir que se marcharan sin ella", perfecta, no podría definirla de otra forma:)
Un beso Carlos

Anonimo ha detto...

:-O
Nunca se me había ocurrido eso de usar el "pasillito" hasta el altar de la iglesia como pista de patinaje y ahora que me has dado la idea... creo que me pilla demasiado grandecita para hacerlo, ¿no? jejeje :P

P.D. No soporto a las viejas que cuchichean a las puertas de las iglesias. Yo, que no voy a la iglesia como ellas y seguramente lo encuentren totalmente reprorable... no me dedico a perder el tiempo como ellas lo hacen!! Eso tiene un nombre... ¿cómo era? Doble moral... ¿no? jejeje
Me ha gustado mucho!! Besossssssssss

Anonimo ha detto...

Otra increíble historia de denuncia cielo...

Increíble como siempre... Ya lo sabes, que mas decirte...

Besines de todos los sabores y abrazos de todos los colores.

Pedro ha detto...

Hola!!! Me ha gustado mucho el tema que has elegido. Creo firmemente que nuestros cuentos deben no solo divertir y distraer si n0 también concienciar, y el tyo lo ha ce de un modo magnífico.


Incluso esa denuincia sobre las apariencias la has bordado.

Un saludo,

Pedro.

PATRICIA P. ha detto...

como estas? sé que soy muy desatenta en comentar pocas veces en tu blog.. no es una excusa, pero por un tema muy particular me veo obligada a trabajar mucho y con poco tiempo para navegar por las pag. que me encantan, como la tuya. pero quiero agradecerte tus comentarios y decirte que junto con los de otros cuentacuentistas, son las opiniones que me gusta leer, que tus comentarios ya pasaron a ser importantes para mi asi que ¡muchas gracias! te escribo por este medio, porque no tengo tu msn y tal vez es un poco indiscreto, hacerlo asi...
respecto de tu blog , me encanta ese modo de comenzar que tenes "a partir de una frase..." y un comentario, interesante y comprometido... me gustaria muchísimo seguir esta conversacion con vos..
hasta el prox relato...

Anonimo ha detto...

Hola Carlos cariño, muchisimas gracias por tus palabras, ahora la verdad me siento un poco mas feliz que antes y todo gracias a una persona que me ha demostrado que la vida existe. A pesar de todo en ella esta la felicidad y por ahora me rodea totalmente. Recueda que puedes contar siempre conmigo >Carlos, Saludos desde Las Palmas de Gran Canaria. donde tienes a una amiga para siempre.